Historia de la Parroquia

HISTORIA DE LA PARROQUIA DE LOURDES

I- Bajo el manto amoroso de la Inmaculada


Las advocaciones marianas que florecieron a lo largo del Río Ctalamochita –antes Tercero- signaron los orígenes de esta Diócesis y sus comunidades de fe poniéndolas bajo su amantísima protección. La devoción de María en su Inmaculada Concepción fue traída por los colonizadores españoles y se quedó para siempre en el corazón de estas pampas, fortalecida por la labor evangélica de cientos de sacerdotes y religiosos que asumieron la misión de traer el Evangelio, la Buena Noticia de Jesús a estas tierras.


 

Comenzando este viaje,
de recuerdos, y algo más,
comenzaré esta historia
-con modestia - a contar.

Hablaré de nuestro pueblo,
Villa amada de María;
y contaré alguna anécdota
para su espíritu honrar.

Diré que hay buena tierra,
que da fruto con labor;
y hablaré de su gente,
de la buena la mejor.


 

No olvidaré sus fiestas
que nos tienen hoy aquí;
yo mismo – y los invito a todos-
en ellas me pienso divertir.

Honor a nuestra Patrona,
Y a los hermanos honremos,
Éstos son los objetivos
que seguro conseguiremos.

Continúo mi pregón,
mas ahora hablando en prosa.
Que, si se escribe con amor,
llega a ser igual de hermosa

II- La palabra fundante de Mons. Deane


El origen de la Pquia. de Lourdes se encuentra estrechamente ligado a los primeros tiempos de la Diócesis de Villa María. En el año 1958, el Obispo, Mons. Alberto Deane, adquirió unos lotes en el barrio Ameghino. Los vecinos erigieron en el lugar una gruta en honor a Ntra. Sra. de Lourdes, y el 11 de febrero de 1958, Mons. Deane anunció la creación de la primera parroquia de esta ciudad, bajo la advocación elegida por los vecinos.


Salve Madre, Madre nuestra de Lourdes,
Te saludan los cantos que alza el amor.
Reina de nuestras almas, flor de las flores,
Muestra aquí de tus glorias los resplandores
Que en el cielo tan solo te aman mejor.


Virgen Santa, Virgen pura, vida, esperanza y dulzura
del alma que en ti confía, Madre de Dios,
Madre mía, mientras mi vida alentare,
todo mi amor para ti, más si mi amor te olvidare,
Madre mía, aunque mi amor te olvidare,
Tú no te olvides de mi.


El Decreto fue proclamado el 27 de septiembre de 1960, aniversario de la fundación de Villa María y el primer sacerdote asignado a la flamante Parroquia, fue el Pbro. Mons. Jesús Abelardo Pedraza, quien asumió el 1 de octubre de 1960.
El entusiasmo de los parroquianos por construir un templo hizo que se pusieran manos a la obra sin descanso y así, junto al Párroco, fueron sentando las bases materiales y espirituales de la comunidad parroquial.


III- La Parroquia comienza a crecer

La primera Comisión Pro-Obra comenzó su trabajo en 1960, bajo el asesoramiento del Padre Pedraza. El Sr. Ángel Delfino, don Segundo Ferreira y el Sr. Víctor Sánchez. También la Sra. Carmen López, el Sr. Raúl Bizzutti, el Sr. Jorge Cora. Esta Comisión continuó, con variantes entre sus miembros, hasta el año 1985, es decir que gracias a su labor sostenida y generosa la Parroquia fue creciendo en obras edilicias, al tiempo que acrecentaba su vida espiritual con el auxilio de María.
Del 2 al 11 de febrero se celebró la primera novena patronal. El templo está aún sin terminar.
De estas épocas muchos recordarán las “grandes kermeses”.
El P. Pedraza junto a la comisión de fieles parroquianos emprendió también la tarea de construir la casa parroquial, una modesta vivienda. Para lo cual el sacerdote puso a disposición su patrimonio personal. Él cavó los cimientos de esta Parroquia y tan hondo que aún hoy se mantienen, tanto en el edificio material como en la vida de la fe.

 

 

Por el obispo Deane fundada
sin iglesia, ni casa parroquial,
a unas cuantas cuadras de la Catedral
la parroquia de Lourdes está situada.


Libre y desprendida se fundaba,
y humildita comenzaba
y se transformará en lugar santo
al ser por todos visitada.

 

Pedraza diseñó, junto a su comisión,

El plan pastoral, espiritual y material,

Y con “grandes Kermeses” se celebró,

La primera novena patronal.
 



 


El 1 de agosto del año 1965, asume el Pbro. Gaspar Galasso, quien estuvo muy poco tiempo, hasta el 24 de abril de 1966, y continuó la tarea iniciada desde la fundación.

IV- En el marco del Concilio Vaticano II


En abril del 66, Mons. Deane nombra al Padre Carrier, con el mandato expreso de continuar con las asociaciones parroquiales existentes: la comisión de Obras Parroquiales, de Acción Católica, Liga de Madres y Legión de María que ya estaban funcionando en la comunidad parroquial.
Hacia fines de la década del 60 se creó la primera agrupación Scout de la Parroquia. Institución que perseverarían con mayor vigencia a lo largo del tiempo.
En este período la Iglesia toda estaba viviendo el espíritu del Concilio Vaticano II y la Parroquia de Lourdes, no permanecía ajena a estos vientos de cambio y renovación que los Pontífices Juan XXIII y Pablo VI impulsaron con tanto ardor. En este sentido, el Departamento de Espiritualidad junto al Párroco trabajaron en la difusión de los Documentos Conciliares mediante circulares, boletines informativos, catequesis y charlas de formación.

Al P. Carrier lo sucede, en octubre del 68, el Rev. Padre Ugo Paolo Salvatto.


Después de Gallaso y Carrier

Llegó el Ugo Salvatto

¡Gran personaje singular…!

¿Y… Quién le pone el cascabel al gato?

 


 

V- La parroquia de la caridad

 

Enseguida puso manos a la obra. En primer lugar organizó un comedor para niños abandonados, luego un dispensario para distribuir medicamentos y también un centro de distribución de ropa y calzado para los más necesitados. Estos últimos funcionaban en la casa del matrimonio Mandrile, Domingo y Yoli, los “vecinos por excelencia”, quienes desde los primeros tiempos estuvieron siempre atentos a las necesidades del sacerdote y de la comunidad. Hasta el día de hoy, Yoli no ha dejado jamás que le falten flores a la imagen de la Virgen de Lourdes y cuando alguien encuentra la Parroquia cerrada, se dirige sin dudar hacia su casa donde encontrará información, un lugar donde dejar donaciones para el ropero comunitario o la llave del templo para cualquier actividad.

A la parroquia llegaron a concurrir más de quinientos niños a prepararse para recibir la Comunión, la Reconciliación y la Confirmación, asistidos por más de veinte catequistas.

En un año llegó a bautizar a más de mil niños y todos los sábados se realizaban de tres a seis casamientos. Por otra parte, visitaba incansablemente a los enfermos dándoles asistencia espiritual y material.

Los jóvenes también encontraron en él un pastor preocupado por su rebaño. Así, sosteniendo que la Verdad no se aprende sólo en las aulas, llevó a grupos de adolescentes y jóvenes en numerosos viajes, dentro y fuera del país. Muchos recuerdan especialmente un viaje de cuarenta días por Europa, del cual participaron más de ciento sesenta jóvenes de la Parroquia.

Fue tan importante la figura de este sacerdote y su paso por Lourdes que muchos villamarienses aún hoy se refieren a la Parroquia como “la iglesia del P. Ugo”. La impronta de caridad fue tan grande que el ejercicio de esta virtud para con los más pobres sigue destacándose aún hoy como una prioridad.

El veinticuatro de junio de 1983 el P. Ugo es trasladado por el Obispo, Mons. Disandro, a la Parroquia de Ntra. Sra. del Rosario, en Cruz Alta.


VI- Volver a empezar…


La partida del P. Ugo fue muy dolorosa para la comunidad.

Mons. Disandro designa como párroco a Mons. Ángel O. Tossolini Olivier, quien asume el 31 de julio de 1983. Al mismo tiempo se nombra al P. Ángel Elio Aguirre como Vicario Cooperador.

A partir de ese momento, la Parroquia de Lourdes sigue creciendo de la mano de María y apoyada en el tesón y lucidez únicos del P. Tossolini.


 

VII- Hacia las Bodas de Plata

 

A comienzos del año 1984, se forman varias comisiones e instituciones parroquiales, Cáritas Parroquial, Apostolado de la Oración, Comisión Administradora, Legión de María, Grupo Juvenil y Rama Juvenil de la Legión de María. En los documentos pueden leerse algunos nombres: Juana de Bertón, Angela

de Belbe, María Antonia Ingaramo y Blanca de Segura, de la Legión de María, junto a Evangelina Bersano, Claudia Domínguez, Sandra Moreno y Javier Arenas en la Rama Juvenil de esta institución. También figuran Sergio Rubiolo, Ana Luppo, Silvana Priasco y Sergio Mir como la primera Comisión Directiva del Grupo Juvenil, con el asesoramiento del P. Aguirre. La Parroquia se iba consolidando y organizando. Se publicaba un boletín llamado “La Voz de la Parroquia”, en el que se podían leer noticias de la comunidad local y también de la comunidad eclesial universal, siempre precedidas del mensaje del párroco exhortando a acrecentar la vida de fe.

A la gestión de Mons. Tossolini se debe una donación por parte de Adveniat (Institución alemana para ayuda a la Iglasia necesitada), para la construcción de una nueva casa parroquial que pudiera albergar las necesidades de los dos sacerdotes. De esta forma se pudo destinar la antigua casa adyacente al templo para reuniones, catequesis y atención de las diversas necesidades de la comunidad.

El 26 de mayo de 1984, Mons. Tossolini termina su breve pero fecundo paso por la Parroquia y el Obispo nombra como párroco al P. Angel Aguirre.

Y así llegamos al año 1985, para festejar las Bodas de Plata, los veinticinco años de la Parroquia de Lourdes, que se celebraron con una gran fiesta religiosa, que comenzó con la visita de una imagen de la Virgen de Lourdes, réplica de la original, del 12 de octubre al 16 de noviembre. El 6 de noviembre dio comienzo la novena de Acción de Gracias que culminó con la solemne misa presidida por Mons. Disandro, seguida de un almuerzo comunitario. En algunas fotos puede observarse la multitudinaria participación de la feligresía en este extraordinario evento En la ocasión también estuvo presente el primer párroco, P. Pedraza y muchos miembros de la primera comunidad, como Doña Juanita Bertón, las familias Sánchez y Delfino, Doña Judith de Arrieta y tantos otros que sería imposible nombrar en esta reseña histórica que recién ha llegado a la mitad del camino, de la mano de nuestra Patrona, madre y maestra de la comunidad.

 

 

Señora Inmaculada,
Madre de nuestro pueblo,
No nos desoigas, te pedimos;
protégenos con esmero;
cuídanos con cariño,
con tu corazón sincero.

 

Los 25 años del grupo scout de Lourdes

 

Como se mencionó anteriormente, en los años ´60 ya había empezado a funcionar un grupo scout en nuestra aprroquia. Pero, es en 1985 – 1986, que un grupo de dirigentes y raiders del Grupo Scout Nº 378 “Alberto J. Irisarri” que funcionaba en la Parroquia Ntra. Sra. Del Rosario, decidieron formar un nuevo Grupo Scout.

 

Algunos de esos raiders fueron: Pablo Aichino, Ricardo Zanotti, José Frencia. Edgardo Nuñez, Norberto Bizarri, etc.

El 7 de Noviembre de 1985 en el Templo Parroquial, se lleva a cabo las primeras promesas, por eso se considera este día como el nacimiento del GRUPO SCOUT NUESTRA SEÑORA DE LOURDES. En la ocasión con la presencia de los padrinos del grupo, el 378, promesaron Juan Luque (1º Jefe de Grupo), luego realizaron cambio de pañuelos, Martín Gray, Leonardo Muñoz, Ariel Zeballos y Marcelo Muñoz. Era cura párroco en ese momento Ángel Aguirre.

 

 

 

 

VIII- La comunidad crece, y también las necesidades…

 

Dado el aumento de feligreses que se acercaban a participar de la vida parroquial surge la necesidad de construir un salón de usos múltiples. Como el nivel socioeconómico de esta jurisdicción parroquial era muy bajo y la situación económica del país, muy inestable, el párroco gestionó una nueva donación a Adveniat y nuevamente la generosidad de los cristianos alemanes favoreció a esta comunidad y se pudo comenzar la construcción del Salón Parroquial. También los fieles contribuyeron con numerosos eventos para completar el inicio de la construcción.

En 1987, el Obispo autoriza la creación de la Comisión Pro-Templo de la Capilla Ntra. Sra. Del Carmen, en Barrio Carlos Pellegrini, importante centro de espiritualidad en ese sector del territorio parroquial. Dicha comisión comenzó a trabajar bajo el asesoramiento del P. Aguirre.


 

Y la Madre de Dios sonríe con gozo,

al ver cómo dos de sus nombres más queridos,

en un solo corazón, han quedado prendidos.

 

Que un ángel, allá en la Gloria
se olvidó ya, del Calvario.
Y al pecho lleva el escapulario,

 

Y sonriendo, mira al cielo
porque a la Flor del Carmelo
le están rezando el Rosario.

 

Junto a la necesidad material, también crecía la necesidad espiritual y en este sentido cumplió un importante papel la Renovación Carismática Católica, corriente de gracia que alcanzó con ímpetu a este rincón de la Iglesia, en este humilde sector de la Diócesis de Villa María. Los Seminarios de Vida en el Espíritu Santo generaron muchísimos Grupos de Oración. Según testimonios eran más de cien las personas que asistían regularmente a orar en comunidad.

En marzo de 1988 la Parroquia de Lourdes junto a la Parroquia de la Santísima Trinidad organizaron un evento sin precedentes en la Diócesis: la visita del P. Darío Betancourt, sacerdote colombiano llamado a predicar el amor misericordioso de Dios, y autor de numerosos libros sobre oración y sanación. En esta ocasión estuvo acompañado por Blanca Ruiz. También se concretó, a través de la Parroquia, la visita de otros predicadores, entre ellos el P. Emiliano Tardiff, el matrimonio Henao y María Elena Curutchet.

Indudablemente la oración unía a la comunidad en una verdadera familia. Muchos recuerdan de esta época los grandes “jolgorios”, es decir, reuniones periódicas que se originaban en cualquier ocasión que pudiera dar motivo al festejo.

En enero de 1987, el P. Ángel organizó un histórico viaje a Salta con un numeroso grupo de fieles. Aún hoy muchos de ellos recuerdan con alegría, y mediante un nutrido anecdotario, las vicisitudes de ese viaje, que se realizó casi totalmente en tren.

Por estos años comienza a funcionar la Escuela Bíblica del Espíritu Santo, importante centro de formación para la comunidad, donde no sólo se podía aprender sobre la Palabra de Dios sino sobre otros temas concernientes a la catequesis y la vida espiritual.


Otra institución que cobró impulso es la Obra de las Vocaciones Eclesiásticas (OVE), como una necesidad de asistencia a los seis seminaristas que pertenecían en ese momento a la Parroquia. De ellos, cuatro son hoy sacerdotes de la Diócesis: el P. Sergio Rubiolo, el P. Eduardo Stéfani, el P. Iván Bersano y el P. Sergio Peralta.

El 29 de octubre de 1989 se entroniza la imagen de Ntra. Sra. de Lourdes en la ermita que se encuentra en el Bvard. Argentino, frente al predio de Funesil, en la salida hacia San Francisco. Tanto la gestión del lugar como la compra de materiales y la construcción se debe enteramente a la Legión de María, siempre presente en la vida de la comunidad. Doña Judith de Arrieta cuenta que se acercaba la hora de la inauguración y aún no habían podido conectar las luces, por lo tanto mandó a sus hijos a que terminaran el trabajo y así poder tener presente a María en una de las entradas a nuestra ciudad, esta Ciudad de María.

En diciembre de ese mismo año, el Padre Angel Aguirre es trasladado a la Parroquia “Sagrado Corazón de Jesús” de Oliva y el Padre Damián Santiago Bitar asume como párroco de Lourdes.


IX- De la mano de María por las calles de los barrios


Si hay algo que caracterizó a la presencia del P. Damián en la Parroquia fueron las procesiones. Algunos feligreses comentan que “la Virgen no se quedaba adentro del templo”. La espiritualidad popular fue el eje sobre el que giraba la comunidad parroquial. La parroquia salió a la calle: procesiones en la sede y en los centros, bicicleteadas, misiones de casa en casa con la imagen de la Virgen. El 27 de julio de 1992 la Parroquia recibió la visita de la Imagen Peregrina de Ntra. Sra. de Fátima, recibida con gran júbilo por toda la feligresía.


No se pueden dejar de recordar también las representaciones del Pesebre Viviente para Navidad, el Vía Crucis en Semana Santa o las apariciones de la Virgen de Lourdes a Bernardita, durante la Novena Patronal. Los jóvenes de Acción Católica preparaban estas producciones (letra, musica por Gerardo Esteban Castro) como muestras de religiosidad popular, para acercar el misterio de la salvación a los habitantes de la parroquia. En el año 1992, con motivo de los 500 años de Evangelización en América se presentó la Cantata de los Santos Latinoamericanos, interpretada enteramente por jóvenes de la comunidad.

Un dato que no se puede dejar de señalar es que el día 8 de junio de 1991, en la sede parroquial, presidió su primera misa el P. Fabián Gili, quien se desempeñaba como diácono en Lourdes desde el año anterior.


Por otra parte, no se dejó de fomentar la asistencia material a los más necesitados. Al comedor “Cura Brochero”, existente en la sede parroquial desde el año 1989, se sumaron, en 1991, dos nuevos comedores: “Sta. Teresa del Niño Jesús” en Barrio San Nicolás, que luego se llamará “Centro San Nicolás y Virgen del Valle”… y “Ntra. Sra. de Guadalupe”, en Barrio Carlos Pellegrini, que ahora se llama Barrio Felipe Botta.

 

Desde el cielo una hermosa mañana,

La Guadalupana bajó y aquí está

Suplicantes juntaba sus manos

Y eran mejicanos su porte y su faz


Su llegada llenó de alegría

De luz y armonía, Toda la vecindad

 

Junto a la plaza pasaban los niños

Y se acercaron al oír cantar

A los niños la Virgen les dijo:

Este barrio elijo para hacer mi altar.


En un manto entre rosas pintadas

Su imagen amada se dignó dejar

Desde entonces para los parroquianos

Ser guadalupano es algo especial.


 

“Caminante, no hay camino, se hace camino al andar…”. Y así, caminamos hacia el Barrio San Nicolás. Y allí, la Madre también quiso estar, esta vez, la Virgen Morenita, la Virgen del Valle, se puso como patrona del lugar.

 

Señora, Reina del Valle,
amantísima Patrona
eres fuente de alegría,
que nos guía y nos ampara.

¡Salve!, Maravilla del Señor!
¡Salve!, Virgen María!.

Señora, Reina del barrio
Arca fiel, Madre amorosa,

¡Salve!, María del Valle,

de mi pueblo la esperanza,

¡Salve!, Maravilla del Señor!
 


 

En 1992, se inauguró la Guardería “Portal de Belén” en Barrio Nicolás Avellaneda, en el edificio del Centro Polivalente de las Hnas. Rosarinas, con el objetivo de ofrecer un servicio a las madres que trabajan y deben dejar a sus hijos pequeños. Esto se logró aunando esfuerzos con el Instituto Del Rosario y la Escuela de Servicio Social “Card. Ruffini”.

En ese mismo año, se creó en la sede parroquial un “Refugio del Peregrino”, para ofrecer cobijo a personas que estuvieran de paso por la ciudad y no tuvieran dónde pasar la noche. En marzo se presentó la primera maqueta del proyecto edilicio de la sede parroquial.


En el mismo año 1992 se instalan en el ámbito de nuestra parroquia las Hnas. Adoratrices, cuyo carisma es trabajar en la promoción de la mujer en situación marginal. Las Hermanas se instalaron en una casa cercana a la sede parroquial en la calle Independencia al 200, pero después construyeron su casa definitiva en la esquina de Independencia y Teniente Ibáñez, en Barrio Carlos Pellegrini. La presencia de esta comunidad de religiosas fue un don de Dios para estos barrios, ya que inmediatamente se pusieron a disposición del Párroco y trabajaron junto a Cáritas Parroquial en la promoción humana de mujeres y niños de los barrios más carenciados.



Y la madre de los pobres
Habla siempre en silencio
Con tantas almas que encuentran
En su mirada el consuelo.

Y en la noche, una novicia
Cambia la oración en beso
Que deja sobre tus manos

Mientras canta sonriendo.

Mientras, el barrio, entregado
Va cerrando su sendero
Con el sello luminoso
Del amor más verdadero.

 

El 19 de julio de 1992 se realizó en la Parroquia la Ordenación Diaconal de Sergio Rubiolo y Eduardo Stéfani, ambos hijos de esta comunidad, que el 20 de diciembre de ese mismo año recibieron el ministerio sacerdotal. El Padre Sergio ofició su primera misa el 21 de diciembre y el Padre Eduardo la víspera de Navidad. Ambas ceremonias tuvieron lugar en el templo parroquial.

El 16 de abril de 1993, el Padre Damián es trasladado y en su lugar asumió, el 24 de ese mismo mes, el Padre José Pedro Nicolás Lucchese.

 

X- Grandes cambios edilicios

 

El P. Pedro continuó la obra de su antecesor. En el año1993 toma la decisión de variar el proyecto edilicio original, cambiando de lugar el templo. A tal efecto, se realizaron refacciones y adaptaciones en el salón de usos múltiples para darle un aspecto más acogedor y se reservó el antiguo templo para los “usos múltiples” a los cuales estaba destinado el otro edificio.


También en esta época se obtuvo el subsidio del gobierno provincial para asistir a las necesidades de los comedores parroquiales. Esto fue de mucha ayuda para poder ofrecer un servicio más completo a las familias de la zona, especialmente a los niños.

Por otra parte, se gestionó un nuevo subsidio a Adveniat y nuevamente los católicos alemanes fueron generosos con Lourdes. De este modo se pudo construir un salón en el Barrio Carlos Pellegrini.

En agosto de este año se establece el vínculo entre Cáritas de la Parroquia de Lourdes y el Hogar “San José”, a cargo del matrimonio Olmedo.


Es importante señalar que en el mes de mayo de 1995 la comunidad recibió con alegría la visita pastoral del Sr. Obispo Mons. Alfredo Disandro, quien participó durante cuatro días en la vida parroquial y se unió en la Eucaristía a todos los feligreses de los barrios.

El 2 de diciembre de 1995, el P. Pedro fue destinado como párroco de la Iglesia Catedral y la Parroquia de Lourdes quedó bajo el cuidado del Rev. P. Mariano Carlos Pérez.

XI- La Catequesis como centro de la vida parroquial

El P. Mariano se destacó por la importancia que le dio a la catequesis de iniciación y a la formación de los catequistas, como así también del resto de la comunidad y de cada institución. Charlas, cursos, publicaciones periódicas dan cuenta de este especial interés que el sacerdote junto a un grupo de laicos sostenía como prioritario.


Por estas épocas, la parroquia debió luchar contra un enorme obstáculo: el sostenimiento de los comedores parroquiales y la guardería. El subsidio que el gobierno provincial se había comprometido a enviar periódicamente se veía cada vez más escaso y esporádico. La comunidad estaba sintiendo los efectos de una crisis económica que afectaba a todo el país y eso dificultaba el normal funcionamiento de los centros de asistencia a los más necesitados. Sin embargo, con el apoyo de los fieles y la protección de María se pudo continuar con esta obra.

El P. Mariano fue trasladado el 18 de octubre de 1997 y en su lugar asume como pastor de la comunidad el P. Fabián Antonio Gilli, quien ya había estado ejerciendo su ministerio diaconal en Lourdes, junto al P. Damián.

 

XII- La Parroquia se abre hacia la comunidad toda

 

El P. Fabián inmediatamente encara las obras de ampliación del comedor “Cura Brochero” y de la casa parroquial. Si bien se contrataron albañiles, siempre se veía al sacerdote en ropa de fajina trabajando a la par de ellos. Incluso muchos fieles seguían su ejemplo. Tanto es así, que se puede caracterizar simpáticamente al P. Fabián con la pala en una mano y el Evangelio en la otra.


Se inauguran dos famosos eventos que ya son tradición en la comunidad, no sólo de la Parroquia sino de toda Villa María y zona de influencia: la Cena Pascual, en el mes de abril, y la Fiesta del Salame de Chacra, en julio-agosto. Además de ser dos momentos importantes de encuentro, se han convertido en un importante apoyo para los comedores y otras obras sostenidas por la Parroquia.

Con respecto a esto, el diario Puntal de la ciudad de Villa María, señala en su edición del 03/02/98, que en la Parroquia de Lourdes funcionan tres comedores a los cuales asisten más de doscientos niños, quienes reciben una merienda-cena de lunes a viernes, y una guardería infantil para niños de madres de escasos recursos que trabajan en casas de familia. Esta guardería funcionaba en el Centro Polivalente “Mons. Orzali” pero a partir del año 1998 se trasladó a la sede parroquial, con la asistencia de unos treinta niños menores de cinco años.

Si bien todas estas obras estaban a cargo de Cáritas, todos los movimientos se encontraban involucrados en el trabajo de asistencia a los más necesitados.

Por otra parte, se desarrollaba un gran movimiento juvenil, nucleado entre el Grupo Scout “Ntra. Sra. de Lourdes”, reinaugurado en el año 1985, y el grupo de Jóvenes de Acción Católica. Fotos de la época dan cuenta de numerosos adolescentes y jó

venes participando activamente en la vida de la comunidad.



 

Y estando a veces abatidos
por no poder culminar
la empresa que les pidieron,
más de mil almas salvar.

Pidiendo ayuda a la Virgen
implorando su bondad,

Ésta les ofrece el Rosario,
instrumento celestial.

No hay ya nada imposible,
todo se puede lograr.
No mil, millones de almas
por el Rosario en el Cielo están.

 

 

XIII- El Gran Jubileo del año 2000 en la vida parroquial


El Nuevo Milenio llegó y con él, el Gran Jubileo de la Iglesia Universal. Para la Parroquia de Lourdes fue un momento de sacrificio pero también de fecundidad.

El movimiento juvenil se puso de manifiesto desde los primeros días de enero, cuando se realizaron dos campamentos consecutivos en Ckara Huasi, cerca de la ciudad serrana de La Cruz. Primero fue el Grupo Scout y luego los Jóvenes de Acción Católica. En marzo fueron los matrimonios quienes compartieron unos días de convivencia en ese hermoso lugar de las sierras cordobesas. Los campamentos y encuentros de convivencia se multiplicaron a lo largo del año en diferentes lugares.

Un hecho importantísimo para la vida comunitaria fue la creación de la catequesis familiar, como alternativa de la tradicional. Esta instancia de vida de fe en familia dio muchos frutos desde su comienzo y, con algunos altibajos, sigue siendo una excelente elección para compartir la formación de los niños.


Por otra parte, con mucho sacrificio de la comunidad y escasa respuesta del gobierno provincial, permanecieron abiertos los comedores y la guardería, a pesar de la crisis que vivía el país por aquellos días. Gracias a las diversas gestiones del P. Fabián, a la solidaridad de los mismos empleados y, por supuesto, a la protección de María Santísima, se pudo continuar con esta obra cuando parecía casi imposible.

El 22 de diciembre, los jóvenes de Lourdes participaron en el espectáculo “Navidad 2000”, el festival de música cristiana que se llevó a cabo con motivo del Gran Jubileo. Éste contó con la presencia del grupo Metanoia y de Daniel Poli, entre otros.

El final del año jubilar encontró a la Parroquia de Lourdes en medio de un gran movimiento juvenil, una cada vez más amplia labor de caridad y una importante presencia en la comunidad villamariense.

 

XIV- El Nuevo Milenio

 

El primer día del año 2001 la imagen de Ntra. Sra. de Lourdes salió a acompañar la caravana que se realizó con motivo de las Bodas de Oro del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de la ciudad de Villa María.

Mientras tanto, el Grupo Scout, que había festejado sus primeros 15 años de vida en septiembre del año anterior, realizó un campamento aniversario en el Parque Nacional Lanín, provincia de Neuquén: una experiencia inolvidable para aquellos que tuvieron la oportunidad de compartirlo y disfrutarlo.


En ese año se realizaron reformas en la sede parroquial y en el templo, destacándose especialmente la conclusión del anexo para uso del Grupo Scout, en la parte trasera del antiguo templo y actual Salón Parroquial.

No podemos dejar de señalar que en este año se instala en la Parroquia el P. Angel Tossolini como residente, quien había sido párroco durante los años 1983 y 84. Desde entonces el P. Angel es parte de la comunidad parroquial.

Al final del 2001, la Parroquia de Lourdes recibe el premio “Nosotras” como la Institución del Año, por su labor a favor de los más necesitados.

 

El 30 de diciembre, la feligresía de Lourdes participó de la ceremonia de ordenación sacerdotal del Pbro. Gustavo Horacio Piva, quien había sido asignado de antemano por Mons. Rodríguez como Vicario Parroquial. El P. Fabián le asignó como tarea inmediata la predicación de la novena a Ntra. Sra. de Lourdes en el mes de febrero.

 

 

 

 

 

 

 

 

XV- La solidaridad no se detiene


El Diario Puntal, en su edición del 8 de julio de 2002, dice: “Los comedores comunitarios de la Parroquia de Lourdes cubren necesidades de 350 chicos en los barrios Ameghino, Botta, San Nicolás y Nicolás Avellaneda”, y pone de relieve la tarea solidaria de muchos hombres y mujeres de buena voluntad frente al escaso apoyo oficial”.

Por su parte, el 13 de octubre, El Diario de Villa María señala que “doscientas personas trabajan a diario por 400 niños carenciados (…) en un radio que abarca cinco barrios de nuestra ciudad”, en una cálida nota escrita por el periodista Sergio Stocchero, quien pone especial énfasis en el “sueño” del P. Fabián: “cerrar algún día los comedores porque no serán necesarios, porque los chicos volverán a comer en sus casas el pan del fruto del trabajo de sus padres, en este país rico de suelo pero pobre de conciencia solidaria”.

El año 2002 concluye en medio de una crisis socio-económica a la cual la parroquia no es ajena, pero con fe y trabajo los comedores permanecieron abiertos a las necesidades de los más pobres.

En el 2003 se cerró la Guardería “Portal de Belén”, ya que su función había dejado de ser una necesidad para las mujeres que trabajaban, ya que había sido suplida por otras instituciones.

Ese mismo año, el P. Fabián fue designado por la Conferencia Episcopal Argentina para acompañar, en carácter de capellán, a un grupo de familiares de soldados caídos en Malvinas, en un viaje hacia las Islas.

El 23 de julio se realizó un retiro espiritual para toda la comunidad que se llevó a cabo en la Fábrica Militar de Pólvora. En ese mismo mes tuvo lugar la Fiesta del Salame, en una edición sin igual: se vendieron 900 tarjetas, aunque no se pudo satisfacer la demanda de muchas personas que no pudieron asistir por falta de espacio. Como todos los años, este evento fue de gran ayuda para el sostenimiento de los comedores y otros servicios brindados por la Parroquia.


 

En marzo de 2004 comienza a funcionar un nuevo grupo parroquial para niños y adolescentes: la Infancia y Adolescencia Misionera, la institución más nueva en la comunidad. En agosto se entregaron los primeros carnets y en octubre los niños realizaron su compromiso misionero. De este modo quedaron conformados tres grupos que nuclean a niños y jóvenes de acuerdo con los dones y carismas que el Señor reparte a cada uno: Grupo Scout, Acción Católica e Infancia y Adolescencia Misionera. Hasta la actualidad, los sábados por la tarde la sede parroquial se inunda de niños y adolescentes que buscan compartir la alegría de ser hijos de Dios.

 

En agosto de 2004 Mons. Roberto Rodríguez anuncia los cambios en la Parroquia de Lourdes: el P. Fabián es nombrado Vicario General de la Diócesis y el P. Gustavo asumirá como párroco. El 12 de septiembre toma posesión de la Parroquia según Protocolo 368/04, firmado por Mons. Rodríguez y el Pbro. Ariel Manavella, Secretario Canciller. En diciembre de ese mismo año, el Pbro. Juan José Calderón es nombrado Vicario Parroquial.


 

El P. Gustavo continuó la obra que durante más de siete años había guiado el P. Fabián, tanto en lo material como en lo espiritual.


En el centro misionero San José del barrio Botta se construyó un salón de usos múltiples, tan necesario para dar respuesta a las necesidades del sector.

En Las Mojarras, se terminaron las obras en la capilla San Bartolomé, y se comenzó la construcción de cinco aulas de usos múltiples sobre el Salón Parroquial, en la sede de calle Intendente Peña.

Inspirado en la enorme maqueta que se expone en el templo, el P. Gustavo emprendió la culminación del proyecto del frente del templo, especialmente del campanario. Este fue inaugurado el 2 de febrero de 2007, con el nombre de San Lucas, y en su interior alberga dos sonoras campanas: María, Reina de las Misiones y Santa Bernardita.

Todas estas obras se hicieron realidad gracias al esfuerzo de los fieles y la generosidad de empresas y organismos oficiales y privados, como así también de personas particulares, a las cuales sería imposible mencionar, pero que se encuentran seguramente albergados en el amoroso corazón de María.

 

Con respecto al trabajo de Cáritas, es de destacar que en los últimos tiempos se ha puesto especial interés en el apoyo escolar, además de la comida, esto inspirado en la idea de que se debe alimentar tanto el cuerpo como el espíritu y la inteligencia. La alimentación del cuerpo lo mantiene vivo, pero la alimentación del espíritu le permite vivir en plenitud y poder superar la adversidad. De este modo, en la actualidad asisten 160 niños a los comedores y 140 a las clases de apoyo escolar.

posesión de la Parroquia el día 21 de junio de 2009, tras un corto período en el que se hizo cargo de la comunidad el P. Gustavo Gatto.

 

El P. Gustavo Romero fue conociendo poco a poco a la feligresía, ya que su único contacto con la Parroquia había sido durante sus estudios en el Seminario “Jesús Buen Pastor” de la Diócesis de Río Cuarto, cuando fue designado para realizar su actividad pastoral en Lourdes, los fines de semana.


El deseo manifiesto del P. Romero desde su llegada fue darle impulso a la labor espiritual y misionera de la comunidad, de cara al Cincuentenario parroquial. Bajo el lema “50 años de vida, 50 años de fe” la Parroquia comenzó a prepararse para celebrar sus Bodas de Oro.

 

Se realizó en diciembre de 2009 el pesebre viviente, con coreografías totalmente bailadas en ritmos folclóricos. Para esto se contó con la colaboración de la escuela de folclore “27 de abril”, conducida por el prof. Agustín Pedraza, y la participación del grupo scouts de la parroquia.

 

En enero de 2010 se realizaron los dos campamentos juveniles: el de adolescentes de la IAM (Infancia y Adolescencia Misionera) en Villa Fiusa, y el del Grupo Scout en Río de los Sauces. El sacerdote participó de ambos, compartiendo experiencias con los jóvenes y realizando una valiosa labor de acompañamiento espiritual, centrado en los sacramentos de la reconciliación y la eucaristía.

 

En febrero nuevamente recordamos a nuestra patrona la Virgen de Lourdes, este año con una renovada devoción, festejando los cincuenta años. Esta celebración dio inicio a la serie de eventos preparados por el sacerdote junto a la comunidad.

El día 11 de febrero, se realizó solemnemente la bendición de los enfermos por primera vez, con el templo repleto de gente. Consistió en una adoración al Santísimo sacramento, una celebración de la Palabra y la administración del sacramento de la Unción de los Enfermos. Esta ceremonia fue realmente impactante, ya que el marco de solemnidad frente a Jesús Sacramentado, y a los pies de la Santísima Virgen de Lourdes, generó un momento de profunda espiritualidad, cargando los dolores de las enfermedades y recibiendo la gracia sanadora y de alivio en todos los presentes.


Durante todos los días de la novena se rezaron laudes por la mañana y luego la misa vespertina, que contó con un gran número de fieles durante todas las noches, en cada una de las cuales se oraba por una intención en particular.

En las vísperas de la fiesta se halagó a María, con un precioso pregón a cargo del sacerdote, el Padre Gustavo Romero, que culminó con una ofrenda de flores. Durante la vigilia mariana hubo exaltaciones jubilosas, para finalizar con una danza en su honor. Se trata de chacareras y malambos dedicados a la Virgen, a cargo de alumnos de la escuela de danzas nativas de la localidad de Pozo del Molle, dirigidos por la profesora Laura Celada de Sánchez.

 

En marzo, el Sr. Obispo designa al Diácono Diego Zandrino como ayudante del Padre Gustavo, quien desarrolló y sigue desarrollando una tarea importantísima en la parroquia. Sobre todo en los centros misioneros y en comedores. Un espacio que al párroco le costaba llenar por la intensa actividad en la sede parroquial. Acompañando al personal en los grupos de oración, a los niños que allí participan, etc. Acompaña la catequesis y participa en la actividad de todos los grupos parroquiales.

Es evidente su carisma en el trato con los niños, cosa que se manifiesta en la Misa de los niños, en sus predicas y enseñanzas. Su llegada ha sido un bendición del Señor…


En abril, en la fiesta de Pascua de Resurrección la comunidad resplandeció de júbilo en el año de las Bodas de Oro parroquiales. En el aspecto espiritual, es de destacar la importante participación de la feligresía en las celebraciones de la Semana Mayor, como así también la presencia del grupo misionero de Jesús Misericordioso, quienes, junto a algunos misioneros parroquiales, visitaron hogares en los distintos sectores de la Parroquia, llevando el mensaje de Cristo en un renovado anuncio para la realidad de nuestro tiempo y de nuestros barrios.

 

El viernes después del Domingo de Pascua se representó el Vía Lucis, es decir, la conmemoración de la Resurrección de Cristo. La intención fue recordar que el camino de la Salvación no culmina en la Cruz sino en el misterio infinito de la vida eterna. En la realización de este evento participaron jóvenes del Grupo Scout, adolescentes de la IAM y nuevamente el ballet/grupo de teatro de Agustín Pedraza.


Además, en la fiesta de Jesús Misericordioso, el domingo después de Pascua, se realizó “La posta de la llama de la Divina Misericordia”.

Se trata de la llama que encendió Juan Pablo II, en el año 2000, en Polonia, al consagrar el Santuario de Jesús Misericordioso, con la consigna de que esa llama llegue a todo el mundo. Esta Llama bendita ya se encontraba en Pozo del Molle, y desde allí se la trajo hasta Villa María.

Para lo cual, se organizó con los distintos grupos de jóvenes una posta. Desde Pozo del Molle trajeron la llama bendita y cruzando la autopista, al frente de Iper Libertad, se la recibió, y encendiendo una antorcha, se la llevó hasta la parroquia, acompañada por un gran número de jóvenes, que la llevaron trotando, pasándose la antorcha uno a otro hasta la parroquia. La llama fue recibida por el párroco, en un clima de gran alegría, gran cantidad de gente, aclamando con vítores, canticos y alabanzas a Jesús Misericordioso. La misa concelebrada por varios sacerdotes , en su honor.


Como todos los años, realizó la Novena en honor al Sagrado Corazón de Jesús, éste, con la particularidad de la clausura del año sacerdotal, iniciado por Su Santidad el Papa Benedicto XVI, en el 2009.


También se celebró la Novena en la Capilla de Nuestra Señora del Carmen, en su honor, coloreando su fiesta con la precesión, misa y pregón a cargo del sacerdote.

 

Oh, Madre del consuelo,

Sobre la alta cumbre del Carmelo,
La blanca nubecilla se adivina
Bordando tu sonrisa en terciopelo,

Y no sabremos nunca si es bastante
El pronunciar tu nombre cada día,
Buscarte la más bella alegoría
Con qué narrar tu gloria cada instante.

Jamás un pobre rezo suplicante,
Ni mil piropos hechos letanía
Podrán copiar la luz de tu alegría,
Aunque mil coplas el cantor te cante.


XVI- En la recta final hacia el jubileo parroquial…


Y comienzan los preparativos para el Jubileo Parroquial. Reuniones, ideas, expectativas, todo llevó a consensuar. Lo más importante era “Navegar mar adentro”. Es decir, celebrar evangelizando. Renovar el espíritu misionero de la parroquia, llegar a todos, aún a los más alejados, visitar los barrios, los hogares, las familias….

La Gran Misionera sería María, como no podía ser de otra forma….


 

Con María por las calles, se recorrieron todas las calles de los cinco barrios que abarca la jurisdicción parroquial, dentro de la zona urbana. Y esto se hizo realidad, mientras se celebraba la novena del jubileo, con adoraciones al Santísimo Sacramento todas las mañanas y misas todas las noches. Fueron días de intensa oración y trabajo misionero, acompañando a María por las calles, portada en una elegante volanta tirada a caballo, lo cual era tan bonito, que llenaba de sorpresa y alegría a toda la feligresía. Centenares de bendiciones de casas y visitas a todos los enfermos permitieron que María de Lourdes llegara al corazón de miles de hermanos.

 


¡Qué inmensa alegría! ¡Cuánto gozo en los corazones! Como con los apóstoles, junto a María, la Parroquia ha sido el Cenáculo de un verdadero y nuevo Pentecostés.


 

 

Virgen bendita de Lourdes,

Madre y patrona nuestra,

Has peregrinado y paseado

Por calles, casas y hogares.


Madre preciosa, de precioso manantial,

Agua bendita nos traes, para sanar todo mal,

 

Madre santa de Lourdes

Te proclamamos nuestra Reina,

Te coronamos de estrellas

Y los ángeles bajan, para besarte bendita!!!

 


XVII- Conclusión….


El hoy de la Parroquia de Lourdes es un continuo caminar y “hacer camino”. Los diversos movimientos e instituciones parroquiales ofrecen a los fieles, distintas posibilidades de trabajar por el Reino de Dios, de acuerdo a los dones y carismas que el Espíritu Santo inspira en cada cristiano. Y al referirnos a todo esto, cuando hablamos de logros, es que nos gustaría gritar, poder decir a viva voz que somos la Iglesia, y estamos orgullosos de ello.


Gritar, pregonar, anunciar y compartir la Buena Nueva. Esa es la misión de la comunidad eclesial. Misión que se ve renovada al celebrar el jubileo parroquial: “50 años de Vida, 50 años de Fe”. El momento importante ha llegado. Ardemos en deseos de anunciar a todos un futuro alucinante cargado de la pasión y la alegría del pasado y que sustenta la labor presente.
De la mano de María, la comunidad continúa creciendo, con la esperanza de ser un faro de luz para todos los hombres y mujeres de la parroquia y de la ciudad. Como ayer, como hoy y como siempre…

Parroquia Nuestra Señora de Lourdes

1960 – 50 años de Vida - 2010

50 años de Fe


ORACIÓN


Santísima Virgen de Lourdes, que a

Ninguno desamparas ni desechas;

Mírame con ojos de piedad y alcánzame

De tu Hijo, el perdón de mis pecados

Para que con devoto afecto celebra tu

Santa e Inmaculada Concepción, en tu

Milagrosa imagen de Lourdes y reciba

Después el galardón de la Bienaventuranza,

del mismo de quien eres Madre. Amén.


 

Mons. José Ángel Rovai

Obispo de Villa María.

(Esta foto va con el prólogo)

 

 


Miembros varios de la comunidad colaboraron para escribir este libro.